Campaña promocional de Fomento de consumo de frutas y verduras.
LA DIETA MEDITERRÁNEA
Entre las dietas alimentarias del mundo destaca la mediterránea sobre la base de tres productos esenciales en nuestra alimentación: el pan, el aceite y el vino. Diversos estudios evidencian que la incidencia de las enfermedades cardiovasculares en la población del Mediterráneo es inferior a la de otros países. De esto se infiere la relación entre dieta mediterránea y salud. Analizando con más detalle las diferencias entre estas principales dietas, se identifica la ingesta de aceite de oliva como pilar esencial en la dieta Mediterránea, donde la grasa animal queda sustituida por el aceite de oliva. Si a ello le sumamos la sustitución de grasas animales -saturadas- por grasas vegetales y procedentes de pescado azul -monoinsaturadas o poliinsaturadas- es otro factor favorecedor de menor incidencia de colesterol.
Al mismo tiempo las legumbres, verduras y frutas desplazan a la carne como elementos básicos de consumo. Ello conlleva que los huevos, productos lácteos, pastas y azúcar, pasan a ser recomendables con moderación. Básicamente el resultado final es que la dieta mediterránea es una dieta rica y variada.

Enlace de interés: «Libro blanco de la nutrición en España»